2012... Caminando
con el Señor... 2013
Amigos y hermanos en la fe.
Ya estamos a puertas de iniciar un
nuevo año, en el cual quiero reafirmar mi compromiso con el Evangelio de
nuestro Señor Jesucristo como ministro y siervo para su iglesia que tanto amó;
dándose a sí mismo por ella.
Este año 2012 que culmina hemos
experimentado la gracia de Dios de muchas maneras, ministrando nuestras vidas
en momentos de victoria y alegría, y también en los momentos de aflicción y
prueba, en medio de tentaciones y persecuciones donde su gracia a
sobreabundado. Moviendo todo a nuestro favor cuando todo parecía perdido. En
medio de la tragedia de un accidente recibimos la buena noticia de nuestra bebe
Noa Isabella.
Cada tiempo vivido junto con ustedes,
a través de facebook y esta página que Dios a puesto en mis manos para
administrar su multiforme gracia a su pueblo que nos sigue desde los diferentes
lugares del mundo, nos ha llenado de gozo. Les agradezco por su paciencia y
confianza en nuestro trabajo que sé en mi corazón, Dios recompensará toda buena
obra.
Agradezco a Dios por cada día en la
congregación Tiempo de Cosecha (Piura y Talara), llorar con los que lloran y
reír con los que ríen ha sido agua de cada día en mi vida y en todo Dios me ha
enseñado a escuchar al rebaño para suplir el alimento a tiempo. Ver a muchos
que se fueron, sentirles distantes me ha hecho mas fuerte pues muchos dejaron
al Señor también porque su palabra les parecía dura. Doy gracias a Dios que
libre estoy de su sangre pues nunca rehusé compartir todo el consejo de
Dios.
Recibir a nuevos miembros y familias ha
sido señal para mi vida de que la mano de Dios no se ha acortado y sigue
extendida para bendecir la obra de nuestra mano.
Un año lleno de experiencias y
revelaciones en la presencia de Dios, un año donde mi matrimonio afloró en
mejores tiempos donde nos sentimos mas unidos mi esposa y yo. Un año donde el
Centro Cívico fue nuestro mejor púlpito, sin aplausos, sin ofrendas grandes,
sin entradas pagadas. Pero con la satisfacción de ser sembradores de la buena
semilla en muchos corazones que aunque no los veamos a todos, sabemos que darán
buen fruto en su tiempo. Pues ningún trabajo en el Señor es en vano.
Este año conocimos e hicimos nuevos
amigos y compañeros de milicia, consiervos y hermanos de diferentes
congregaciones de nuestra localidad a los que hemos podido servir y bendecir en
el Señor.
Un año para agradecer muchas cosas,
una buena esposa, un madre ejemplar, una familia que me apoya y ama, un
pueblo que ama a Dios y le busca. Por todo esto y mucho más le doy la gloria al
que tiene poder para guardar mi lugar en los cielos. No he tomado el pan de
nadie de balde, pues mis manos me han servido para suplir las necesidades de mi
hogar. Pero debo decir gracias a todos aquellos que han honrado y reconocido mi
trabajo en el Señor siendo fieles en sus diezmos y ofrendas. No he tenido
necesidad de engañar ni hacer comercio con el pueblo, he contendido con los que
lo hacen, hemos probado a los que se dicen ser apóstoles y les hemos hallado
mentirosos. Reafirmo mi compromiso para este nuevo año seguir contendiendo
fervientemente por el Evangelio.
Te amo y espero Señor Jesús! Sí! Ven
Señor Jesús! y los que lo escuchan y aman digan: VEN SEÑOR JESÚS!