Una vez que los muros de Jerusalén
fueron edificados y sus puertas instaladas,
porteros fueron asignados a cada casa.
Los muros y puertas no sirven sin los porteros que sepan lo que es y no es permitido dentro. Por lo tanto Nehemías dijo, Y luego que el muro fue edificado, y asenté las puertas, y fueron señalados porteros y cantores y Levitas, (Neh. 7:1).
Note que estos porteros no eran estrictamente sacerdotes. Eran laícos-músicos, porteros, personas de todo camino de vida. Y fueron instruídos: ...No se abran las puertas de Jerusalén hasta que caliente el sol: y aún ellos presentes, cierren las puertas, y atrancad... (verso 3).
Dios le estaba diciendo a su pueblo, mi casa será un lugar de luz, donde las tinieblas no se le permite entrar. Todo aquél y todo aquello que entre aquí sea un libro abierto, sujeto a la luz de mi Palabra.
Recientemente supe de una trágica historia de un ministro de una iglesia muy grande. Este hombre era bien conocido en su área, y fue descubierto cometiendo adulterio. Algunos pastores consagrados en el área estaban preocupados y fueron a los ancianos de la iglesia de este ministro. Sugirieron que se le dieran seis meses al ministro. Entonces ellos se ofrecieron para apoyar, disciplinar, ministrar y restaurar - todo según las escrituras.
Pero los ancianos rechazaron la oferta. Al contrario decidieron quedarse con su ministro, sin disciplina alguna. Les dijeron a los pastores, No queremos perdernos los sermones de nuestro ministro. Él es muy elocuente. Y además, él es un buen hombre, un buen amigo en la iglesia. Tu sabes, todos tenemos nuestras debilidades.
Una mujer en la congregación estuvo de acuerdo, diciendo, no importa lo que hizo el pastor. Su predicación es la única que hace que mi esposo inconverso venga a la iglesia conmigo. Voto para que se quede.
Todas estas personas tenían un encargo claro de Dios para actuar como porteros. Pero rechazaron cerrar las puertas a las tinieblas. Tristemente, se dejaron sobornar por una atadura humana.
Le digo a todo anciano que este leyendo este mensaje, incluyendo a los ancianos de la iglesia Tiempo de Cosecha: Nunca permitan ser cegados a la Palabra de Dios por su familiaridad con cualquier ministro. Usted ha sido escogido por Dios para ser un portero en los muros de su casa. Y si alguien trae un evangelio a tu iglesia que no es según las escrituras, es tu deber decirle con amor al predicador que está equivocado.
Como guardas, debemos guardar las puertas de la casa de Dios con humildad - a través del ayuno, oración, y preocupación amable expresada por el temor de Dios.
0 comentarios:
Publicar un comentario