CARTA A MI ESPOSA EN SU DIA

La vida sin amor, no tiene sentido. Lo que importa no es tanto lo que uno hace sino cuanto amor pone en hacerlo. En mi batalla de ser integro en nuestro matrimonio, entendí esto, no es cuanto deseo tenga de ser un buen esposo, si no cuanto amor colocaré en serlo. 



Hoy en medio de todas mis debilidades, estoy luchando día a día por restaurar las heridas que dejan mis defectos, le pido a Dios que me ayude a validar día a día un arrepentimiento genuino por medio de la transparencia, honestidad, sinceridad, a través de vivir en integridad y amor, cosas que muchas veces rompemos los hombres con facilidad, algunas veces pensamos que no cometemos errores pero la biblia nos manifiesta lo propensos que somos a fallar.

Siempre me has perdonado toda torpeza en estos cuatro años, y me has dado la oportunidad a construir todo aquello que el enemigo quiso destruir. El perdón lo podemos obtener en el momento, pero la confianza necesita tiempo para restablecerse.
¿Sabes? Entendí que no se trata de sentirme culpable cada vez que vea tus ojo, no se trata de permitir que mi pasado siga ocupando un lugar de vergüenza en mi corazón y en el tuyo, se trata de restaurar las bendiciones que Dios nos prometió al intercambiar esos anillos en el altar, se trata de no olvidar el propósito que Dios nos dio al unirnos en matrimonio, se trata de reconocer que todo lo que quiso y quiere estorbar nos es un plan del enemigo, se trata de pelear para validar el amor verdadero, y no mirar nuestras flaquezas.

Muchos se preguntan ¿Cuál es el verdadero amor? ¿Cuándo llevamos una vida doble? ¿Cuándo nos enojamos por todo? ¿Cuándo nos hay comunicación? ¿Cuándo los conyugues se golpean? ¿Cuándo miramos los errores uno del otro? El verdadero amor no puede basarse en mentiras.

El verdadero amor es el que está basado en la verdad y ese amor me espera en casa. Siempre ha estado allí, porque es el que puedes tomar de la mano fuertemente y vivirlo sin esconderte, puedes expresarlo sin temor a ser descubierto como pasa en los adulterios, el verdadero amor es disfrutar de la persona indicada, tu esposa. Muchas veces no nos damos cuenta de lo que tenemos hasta que lo perdemos como le sucede a los que se divorcian por cualquier causa.

Por eso Lorena, quiero pedirte que perdones todas mis debilidades, todos mis defectos y errores, mi falta de atención, mi falta de compromiso y tiempo para ti, hoy quiero demostrarte cuanto te amo dedicándote tiempo. Mi amor ya no será medido por lo que pienso o hago, sino por cuanto entregaré de mí, no habrá nada que substituya el poder pasar tiempos juntos, no tengo ninguna garantía sobre el mañana, deseo serte fiel en todo y cuidar de ti y nuestro futuro bebe.

¡Quiero que vivamos la vida juntos! Sé que esto implicara ser verdaderamente honestos con lo que es de nuestras vidas y con lo que ahora sucede. Me esforzaré por promover todo lo que induzca a la paz y la mutua edificación. Probablemente aún habrá conflictos, pero no perderé el enfoque y buscaré soluciones para no prolongarlos.

Nunca más se trata de ti y de mí, se tratará de nosotros, poner en práctica la misericordia, en lugar de enfatizar nuestros errores.
¡Hoy creo el compromiso de expresar nuestros sentimientos, animarnos en tiempos de dificultad, de apoyarnos, de perdonarnos en misericordia, de hablarnos la verdad en amor, de reconocer nuestras debilidades en lugar de pretender ser fuertes, de respetar nuestras diferencias, de no vivir vidas dobles como muchos matrimonios, de aprovechar el deseo que Dios puso en nuestros corazones de darnos la oportunidad de continuar juntos después de todos mi errores y de asistir a la iglesia con gozo y constancia!

Creo el compromiso de ser el esposo, siervo, amigo y líder que Dios puso a tu lado, ¿y sabes? Hasta el día de hoy sigo convencido que este compromiso es parte de su propósito para nosotros! Aunque muchos no vean la ayuda idónea que eres, y muchos no crean en el matrimonio, lo digo públicamente a través de este medio, demostraremos que con Dios todo es posible.

Que este día sea especial y un nuevo comienzo, le pido a Dios que no sean solo palabras sino una inspiración de su corazón cada línea que hoy escribí para ti. ¡Te amo! ¡Felíz cumpleaños misimore!