David declaró, “no temeré ningún mal” (Salmo 23:4). Él habla aquí de un espíritu tranquilo e impertérrito que Pedro describe. El hombre interior de David permaneció impasible, tranquilo en el corazón, sin importar lo que Satanás le lanzó a él. ¿Por qué? Él estaba descansando totalmente en la fidelidad de Dios para realizar su palabra.
David fue capaz de decir, “tuve una revelación del amor de mi padre y su paciencia hacia mí. Por lo tanto, no aceptaré más mentiras del diablo. Sé mejor que escucharle más, porque el Espíritu Santo me ha educado. Deje que las tormentas de problemas vengan, y que rujan los demonios, que se levanten enemigos por todos lados. Que la enfermedad y hasta la muerte me miren fijamente a la cara. Mi corazón está descansando, porque sé que todas las cosas están en las manos de mi padre. Y él obra todo para bien.”
Por contraste, cristianos que se restriegan las manos no tiene ninguna autoridad. Todo lo que ellos pueden pensar es, “¿Por qué Dios permitiría que pasara esto? ¿Qué voy a hacer?” Sus vidas están llenas de caos, miedo y murmuración, porque han perdido todos los recursos. Ellos descuidaron de esconder la palabra de Dios en sus corazones, así que no pueden volver a ella en tiempos de crisis.
La única rectitud que espanta a Satanás es la rectitud de fe. “El efecto de la justicia (rectitud) será paz; y la labor de la justicia, reposo y seguridad para siempre” (Isaías 32:17). Usted no puede estar de pie contra el diablo simplemente porque ya no bebe o usa drogas. Usted puede vivir con un catálogo entero de hacer y no hacer, pero estos no son la esencia de la rectitud de Dios. La rectitud es creer que lo que Dios dice es verdadero, y comprometer su vida a ello. Es así de sencillo.
Usted no es realmente recto, hasta que usted cree en el poder absoluto de la sangre de Jesucristo para limpiar su alma. Algunos de los testigos más intensos para Cristo que conozco nunca se han permitido sentirse perdonados. Están eternamente convencidos que Dios esta enojado con ellos.
Cuando Isaías dijo “El efecto de la justicia (rectitud) [es]… reposo y seguridad para siempre,” la palabra hebrea usada para la seguridad significa confianza. Simplemente, la fe en la promesa de Dios del perdón produce una confianza firme en nosotros. Todavía podemos ser tentados, pero sabemos que Jesús está obrando en nosotros. Y la Biblia dice que él es fiel para hacer un camino de escape para nosotros resistir bajo todas nuestras tentaciones (ver 1 Corintios 10:13).
En resumen, la autoridad espiritual es esta: camino en la seguridad total de la fiabilidad de la palabra de Dios. Obedezco lo que dice, rindiéndome a cada mandato. Y mi fe en su palabra pone mi corazón en descanso. Satanás no puede más andar en mi presencia. Simplemente tengo que decir, “El Señor te reprenda, Satanás,” y él huirá.
Querido santo, usted no tiene que vivir más bajo la condenación. Usted ha sido perdonado. Usted ha sido entrenado y madurado en la piedad y la bondad de Dios. Y usted esta aprendiendo a crecer en su hombre oculto. Finalmente, usted confía en su palabra para usted en cada crisis. Esto le da a usted todo la autoridad espiritual.
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