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martes, 14 de junio de 2011

LAS AFLICCIONES VIENEN PARA LLEVARNOS AL SEÑOR



Las aflicciones vienen sobre nosotros
para llevarnos al Señor! 


Las aflicciones nos enseñan a doblar las rodillas a clamar al Señor en todos nuestros problemas y angustias.

Al Señor busqué en el día de mi angustia... (Salmo 77:2). Antes que fuera yo humillado, descarriado andaba; pero ahora guardo tu palabra. (Salmo 119:67). Pero cuando se vio en angustia [Manasés], oró a Jehova, su Dios, y se humilló profundamente... (2 Crónicas 33:12). Conozco, Jehova, que tus juicios son justos y que conforme a tu fidelidad me afligiste. (Salmo 119:75).

En el ultimo versículo, David esta diciendo: Señor, yo se porque me afligiste. Tu viste que cuando todo me iba bien, me descarrié, haciéndome descuidado. Así que permitiste que la angustia y los problemas vinieran sobre mí. Tu sabias que me llevaran a mis rodillas y me traerían quebrantado. Mi aflicción era una evidencia de tu fidelidad hacia mi!


... que gemían a causa de la servidumbre, clamaron; y subió a Dios el clamor de ellos... (éxodo 2:23). El clamor de Israel conmovió el corazón de Dios. Ciertamente, el Señor es movido cada vez que sus hijos claman a él desde su aflicción.

Debemos entender algo acerca del corazón de Dios que Dios se siente dolido cuando nosotros estamos dolidos! Él siente nuestra aflicción con nosotros: En toda angustia de ellos él fue angustiado, y el ángel de su faz los salvo; en su amor y en su clemencia los redimió, los trajo y los levantó todos los días de la antigüedad. (Isaías 63:9).

Cada vez que Israel era afligido, Dios se afligía con ellos. Aun cuando Israel pecaba contra el Señor y la miseria caía sobre ellos, ... Y él se angustió a causa de la aflicción de Israel. (Jueces 10:16).

Conozco a mucha gente que tuvo que luchar con horribles esclavitud en sus vidas drogas, alcohol, cigarrillos. La tentación de cruel hábito ruge todos los días. Sin embargo, digo a tales personas: Le importas a Dios! Él conoce la miseria por la que pasas. Y solo él tiene el poder para liberarte. En cada batalla, él esta enseñándote a correr a la cruz - para que clames a él!


El Señor no esta constantemente sobre ti, diciendo: Eres miserable por lo que hiciste. Me has fallado, y ahora estas pagando el precio. Me voy a sentar aquí y voy a esperar que estés bien herido. Luego saldré a rescatarte.

No - tu no le sirves a un Dios así! Tu le sirves a un Dios amante quien siente tu dolor en el momento que tu primero lo sientes. El se angustia cuando te ve quebrantado. Y más que nada, él quiere libertarte.

Puedes pensar que Dios no te esta ayudando en lo absoluto. Pero el te ha escuchado llorar y en ese mismo momento él entró en acción! Déjame demostrártelo:

Dios oyó el gemido de ellos y se acordó de su pacto con Abraham, Isaac y Jacob. Y miró Dios a los hijos de Israel, y conoció su condición. (éxodo 2:24-25). La palabra conoció aquí significa, él comenzó a actuar. Dios escuchó su clamor y entro en acción a su favor.

Tan pronto como Moisés clamo a Dios en el Monte Horeb, Dios trajo fuego al arbusto. Cual es mi punto aquí? Simplemente, es que cada vez que caes de rodillas, Dios toma acción inmediata!
Israel no lo sabia ellos no podían verlo pero Dios se haba encargado. Mientras aun estaban en esclavitud seguían llorando, pensando cuando terminara pero Dios ya había puesto su liberación sobre ruedas. Él estaba obrando, levantando y preparando un libertador para Israel.

Dios también te escucho la primera vez que clamaste a él. Y él comenzó a obrar tu liberación inmediatamente. De hecho, su respuesta esta siendo enviada a ti aun ahora. Claman los justos, y Jehova oye y los libra de todas sus angustias. (Salmo 34:17).

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